La semana pasada nos levantamos con una noticia en un medio local de Utrera (Sevilla), que se hacía eco de un proyecto de entrega de leche de iniciación a familias necesitadas de una localidad vecina. Muchos de los que estáis leyendo esto os preguntaréis qué tiene de especial la noticia. La respuesta es TODO y os explico por qué.
No vamos a entrar a juzgar a las familias ni en guerras de si el pecho o el biberón, vamos a hablar de una realidad que mucha gente no ve o no quiere verlo.
Indiscutiblemente, la mejor opción de alimentación para el recién nacido y el niño pequeño es la alimentación al seno materno, lo dice la OMS y UNICEF:
Las recomendaciones de la OMS y el UNICEF con respecto a la alimentación óptima del lactante y el niño pequeño son:
- Inicio inmediato de la lactancia materna en la primera hora de vida.
- Lactancia exclusivamente materna durante los primeros 6 meses de vida.
- Introducción de alimentos complementarios seguros y nutricionalmente adecuados a partir de los 6 meses, continuando la lactancia materna hasta los 2 años o más.
La leche materna es el mejor alimento para el lactante durante los primeros meses de vida. Cubre las necesidades nutricionales para su adecuado crecimiento y desarrollo físico y desde el punto de vista emocional le asegura el establecimiento de un buen vínculo madre-hijo y una adecuada relación de apego seguro con su madre, ambos esenciales para un correcto desarrollo como persona independiente y segura. Por todo ello la lactancia materna es considerada el método de referencia para la alimentación y crianza del lactante y el niño pequeño.
La superioridad de la leche materna sobre cualquier otro alimento (leche de fórmula artificial) para la nutrición y desarrollo del bebé durante los primeros meses de vida ha quedado bien demostrada en numerosos estudios científicos, que señalan un mayor riesgo de numerosos problemas de salud en los niños no alimentados con leche materna, entre los que cabe resaltar un mayor riesgo de muerte súbita del lactante y de muerte durante el primer año de vida, así como de padecer infecciones gastrointestinales, respiratorias y urinarias y de que estas sean más graves y ocasionen ingresos hospitalarios. A largo plazo los niños no amamantados padecen con más frecuencia dermatitis atópica, alergia, asma, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria intestinal, obesidad, Diabetes Mellitus, esclerosis múltiple y cáncer. Las niñas no amamantadas tienen mayor riesgo de cáncer de mama en la edad adulta. Los lactantes no alimentados al pecho presentan peores resultados en los test de inteligencia y tienen un riesgo más elevado de padecer hiperactividad, ansiedad y depresión, así como de sufrir maltrato infantil. Por otro lado, en las madres aumenta el riesgo de padecer hemorragia postparto, fractura de columna y de cadera en la edad postmenopáusica, cáncer de ovario, cáncer de útero, artritis reumatoide, enfermedad cardiovascular, hipertensión, ansiedad y depresión.
Entonces, si es la mejor opción, si les protege de todas estas enfermedades, alergias y, además, es bueno también para las madres y para la sociedad en general, ¿por qué, cuando hay alguna catástrofe o situación de emergencia, se envía leche artificial?
En el tercer mundo, un gesto como ese supone condenarlos a muerte. No se tiene en cuenta que este tipo de leche se prepara con agua, agua que la mayoría de las veces está contaminada y no es potable o escasea. No se tiene en cuenta que éstas personas carecen de recursos económicos y que, una vez terminen las ayudas, tendrán que costear ellos mismos estos preparados con el esfuerzo que supone. Lo más seguro es que usen menos cantidad de las que recomiendan los fabricantes para alargar la duración del bote y esto lleve al niño a un estado de desnutrición. No se tiene en cuenta quiénes ganan con todo esto, paraos un momento a pensarlo.
Pero no tenemos que irnos tan lejos, aquí mismo, en el primer mundo, en el pueblo de al lado o en el tuyo propio, se hacen campañas de recogida de alimentos para las familias con menos recursos. Campañas en las que se insiste en la necesidad de que se donen alimentos infantiles, en especial leche artificial. Donde no se tiene en cuenta cuál es la mejor manera de alimentar a esos bebés o niños pequeños, donde no se ha realizado una verdadera labor de protección y promoción de la lactancia materna, donde no se han removido los obstáculos que hacen que éstas madres no puedan amamantar a sus hijos. ¿Acaso los hijos de las personas con menos recursos no tienen derecho a recibir la mejor alimentación posible?
Instamos a las administraciones y a todos los poderes públicos a que velen por la salud de los más pequeños, de sus madres y de la sociedad en general con campañas donde se de información veraz sobre lactancia materna, alimentación y otros hábitos saludables. Les instamos y exigimos a que nos protejan ante las continuas violaciones, por parte de los fabricantes de este tipo de preparados, del Código Internacional de Sucedáneos de Leche Materna que nuestro país ratificó en la Asamblea Mundial de la Salud, y del Real Decreto Decreto 867/2008, de 23 de mayo, por el que se aprueba la reglamentación técnico sanitaria específica de los preparados para lactantes y los preparados de continuación.
En el caso de la noticia que nos ha traído aquí, se ha infringido la ley por publicitar, aunque sea indirectamente, preparados para lactantes. Lo explicamos muy bien en el comunicado de prensa que hicimos el pasado día 29 de noviembre.
Queremos que éste mensaje llegue lo más lejos posible, por eso se nos ha ocurrido éste Carnaval Bloguero, queremos que te unas a él, ¿cómo puedes hacerlo?
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Iremos enlazando aquí las entradas de los blogs que se vayan sumando a este Carnaval Bloguero:
Som la llet
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